Hoy os vengo a hablar de una película, como veis simplemente por la carátula, especial. Se trata de The Rocky Horror Picture Show (1975), un musical dirigido por Jim Sharman y protagonizado por Tim Curry, Susan Sarandon y Barry Bostwick. Está basado en el musical The Rocky Picture Show de Richard O'Brien (Riff Raff en la película), y desde su estreno se convirtió en toda una película de culto.
El argumento explica la historia de Janet y Brad, recién comprometidos, a los que se les pincha una rueda del coche durante el inicio de un viaje. Como es de noche y está lloviendo, deciden acercarse hasta un castillo que han visto antes para llamar por teléfono, y allí conocen al científico Frank-N-Furter, un travesti de lo más excéntrico, y a sus criados: Riff Raff, Columbia y Magenta. Allí, Frank les contará a Janet y Brad (entre unas cuantas canciones magníficas) que está a punto de crear vida: un hombre rubio y perfecto que no es nadie más que Rocky.
Lo que a mí me gustó de esta película fueron precisamente las canciones, que no se hacen pesadas como suele pasar en algunos otros musicales; al contrario, son pegadizas hasta decir basta (escuchad Time Warp, mi preferida, si no me creéis). Además tiene un humor ácido e incluso absurdo que la hace, sin duda, peculiar y que no os dejará indiferentes. A mí me dio la sensación de que el film no busca gustar al espectador, simplemente ser y conseguir una reacción por su parte. Desde luego conmigo lo consiguió.
Buscando información y gracias a Wikipedia he sabido que en Madrid se proyectó cada jueves desde 1999 hasta 2002 y que se producían performances durante las proyecciones. Al menos hasta el año pasado también se hacía en Barcelona. Aparte de eso, en cada pase de la película se contaba con la participación de la audiencia, que contribuía con unos cuantos props (objetos) que se utilizaban en un momento concreto de la película. Por ejemplo: ponerse un gorrito de fiesta cuando Frank le canta Cumpleaños feliz a Rocky o usar pistolas de agua para simular la tormenta cuando Brad y Janet salen del coche. En definitiva, ir a ver un pase de esta película debe de ser toda una fiesta.
Finalmente comentar que The Rocky Horror Picture Show tiene las dosis exactas de terror y erotismo pero sin llegar a convertirse en una película de terror ni erótica. Además, cuenta con la (breve) participación del cantante Meat Loaf, destacando así la parte rockera de la película. Por último solo me queda decir que... a Tim Curry le sientan de maravilla los tacones y el liguero.
Como siempre aquí abajo os dejo el trailer por si os animáis a verla (y espero que lo hagáis y que me comentéis vuestra opinión):
¡Hasta pronto!
El argumento explica la historia de Janet y Brad, recién comprometidos, a los que se les pincha una rueda del coche durante el inicio de un viaje. Como es de noche y está lloviendo, deciden acercarse hasta un castillo que han visto antes para llamar por teléfono, y allí conocen al científico Frank-N-Furter, un travesti de lo más excéntrico, y a sus criados: Riff Raff, Columbia y Magenta. Allí, Frank les contará a Janet y Brad (entre unas cuantas canciones magníficas) que está a punto de crear vida: un hombre rubio y perfecto que no es nadie más que Rocky.
Lo que a mí me gustó de esta película fueron precisamente las canciones, que no se hacen pesadas como suele pasar en algunos otros musicales; al contrario, son pegadizas hasta decir basta (escuchad Time Warp, mi preferida, si no me creéis). Además tiene un humor ácido e incluso absurdo que la hace, sin duda, peculiar y que no os dejará indiferentes. A mí me dio la sensación de que el film no busca gustar al espectador, simplemente ser y conseguir una reacción por su parte. Desde luego conmigo lo consiguió.
Buscando información y gracias a Wikipedia he sabido que en Madrid se proyectó cada jueves desde 1999 hasta 2002 y que se producían performances durante las proyecciones. Al menos hasta el año pasado también se hacía en Barcelona. Aparte de eso, en cada pase de la película se contaba con la participación de la audiencia, que contribuía con unos cuantos props (objetos) que se utilizaban en un momento concreto de la película. Por ejemplo: ponerse un gorrito de fiesta cuando Frank le canta Cumpleaños feliz a Rocky o usar pistolas de agua para simular la tormenta cuando Brad y Janet salen del coche. En definitiva, ir a ver un pase de esta película debe de ser toda una fiesta.
Finalmente comentar que The Rocky Horror Picture Show tiene las dosis exactas de terror y erotismo pero sin llegar a convertirse en una película de terror ni erótica. Además, cuenta con la (breve) participación del cantante Meat Loaf, destacando así la parte rockera de la película. Por último solo me queda decir que... a Tim Curry le sientan de maravilla los tacones y el liguero.
Como siempre aquí abajo os dejo el trailer por si os animáis a verla (y espero que lo hagáis y que me comentéis vuestra opinión):
¡Hasta pronto!
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