lunes, 14 de marzo de 2016

Películas de animación

Como ya habréis notado, me gusta mucho el cine, y últimamente (algunas hace años) he visto unas cuantas películas de animación que me han conquistado de la cabeza a los pies. He pensado que podría ser interesante que os hablara un poco de ellas (algunas las conoceréis seguro, otras quizá no) y para ver si así consigo meteros el gusanillo y que veáis alguna porque, de verdad, no tienen desperdicio. 
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Omoide no Marnie: La primera película de la que os voy a hablar estuvo nominada a los Oscar de este mismo año en la categoría de Mejor Película de Animación. Se estrenó en 2014, pertenece a la famosísima productora japonesa Studio Ghibli y está dirigida por Hiromasa Yonebayashi. Está basada en la novela When Marnie was there, que se publicó por primera vez en 1967, de la autora británica Joan G. Robinson. Omoide no Marnie nos cuenta la historia de la joven Anna, una preadolescente solitaria y arisca que tiene asma y que vive con sus padres adoptivos en una gran ciudad. A causa de un empeoramiento en su salud, su madre decide enviarla a casa de unos familiares en la costa para que así se aleje del aire contaminado de la ciudad, y a pesar de que Anna no está muy conforme, al final decide ir. Allí encontrará una mansión que, por algún motivo que desconoce, le resulta familiar y conocerá a Marnie, una niña que vive en ella y con la que trabará una bonita amistad. No quiero sonar repetitiva porque siempre digo lo mismo de las cosas que me gustan, pero esta película es preciosa. La técnica del dibujo es una maravilla, impecable y precisa, al igual que los colores, la banda sonora es estremecedora y el misterio final, si bien no es de esos que te dejan con la boca abierta, es sorprendente y muy emotivo. Yo la he visto dos veces y las dos veces la disfruté muchísimo.
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Song of the sea: de esta película ya os hablé en esta entrada, así que no voy a decir mucho más de ella. Solo repetiré que me encantó de principio a fin por el dibujo, los colores y la música, además de que la historia es preciosa. Tuve ganas de verla desde que supe de su existencia porque me atraen mucho las leyendas irlandesas (las leyendas en general me gustan) y porque, igual que Omoide no Marnie, estuvo nominada a los Oscar del año pasado en la misma categoría. Los personajes son geniales, sobre todo la encantadora Saoirse y el simpático Cu, y el final os hará soltar la lagrimilla si sois sentimentales (llorones) como yo.
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La chica que saltaba a través del tiempo: es una película del año 2006 dirigida por Mamoru Hosoda, y por algún motivo desconocido pensaba que también era del Studio Ghibli, pero no. Sin embargo, y en mi opinión, La chica que saltaba a través del tiempo no tiene nada que envidiarles a las grandes producciones de Ghibli, porque a mí me descolocó por completo y me encantó a pesar del final agridulce. Pero para mí es una imprescindible si os gusta el cine de animación. También está basada en una novela publicada en 1967, en concreto en Toki o Kakeru Shōjo del autor japonés Yasutaka Tsutsui. Cuenta la historia de Makoto, una estudiante de secundaria a la que le encanta jugar al béisbol y que está preocupada porque no sabe si al acabar el instituto podrá seguir viendo a sus amigos Chiaki y Kousuke. Un día, de forma accidental, descubre que puede saltar en el tiempo siempre y cuando sea al pasado, por lo que empieza a usar su recién descubierta habilidad en su propio beneficio sin pensar en las consecuencias futuras que eso acarreará. Vi esta película hará un par o tres de años y me dejó encantadísima, así que si os apetece un poco de ciencia ficción siempre podéis recurrir a ella.
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Spirit: El corcel indomable: no creo que sea necesario que os hable mucho de esta película, ya que si más o menos tenéis mi edad (23) la conceréis seguro. Es una película estadounidense dirigida por Kelly Asbury y Lorna Cook, de DreamWorks Animation, que se estrenó en el año 2002. El argumento explica la historia de un caballo mustang que vive libre en la frontera norteamericana hasta que es capturado por un general que intenta domarlo. Por todos los medios el caballo intentará recuperar su libertad, y en su aventura conocerá a un indio Lakota y a su yegua Lluvia que lo ayudarán a recuperarla. He de reconocer que cuando la vi por primera vez a mis nueve años me decepcioné porque los animales de esta película "no hablaban" como los de la mayoría de películas de dibujos, pero con el paso de los años aprendí que eso la hace más realista y más especial. A mí personalmente me gusta mucho, igual que la banda sonora (tanto en castellano como en inglés), que me parece una maravilla.
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Historia de una gaviota (y del gato que le enseñó a volar): pasa lo mismo con esta, que de todas puede que sea la más infantil. Seguramente ya la conoceréis, pero de todas formas sigue siendo una historia muy bonita y enternecedora. La película, basada en el libro para niños Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar de Luís Sepúlveda (1996), es una producción italiana dirigida por Enzo d'Alò qe se estrenó en el año 2000. Cuenta la historia de Zorbas, un gato gordo y feliz que vive con su dueña y que se divierte saliendo con sus otros amigos gatos mientras luchan contra las ratas del pueblo. Sin embargo, un día encuentra en su jardín una gaviota adulta manchada de petróleo que está a punto de poner un huevo. Como la gaviota sabe que está a punto de morir le pide a Zorbas que no se coma a su polluelo, que lo cuide y que más adelante le enseñe a volar. A partir de aquí el gato se hará cargo de la polluela y, junto a sus amigos, intentará cumplir todo lo que le prometió a su madre. Cuando era pequeña esta película me encantaba a pesar de que me pegaba panzadas de llorar cada vez que la veía (y ahora también me pasa, para qué negarlo). Además, tanto la película como el libro son geniales, llenos de esperanza y de una enseñanza maravillosa: la de que no importa ser diferente.
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Wolf Children: por último os voy a hablar de otra película de Mamoru Hosoda (el mismo director de La chica que saltaba a través del tiempo). Se trata de Wolf Children del Studio Chizu y Madhouse, un film japonés estrenado en 2012. Mi querida Patri del blog Garabateando claquetas hizo una crítica de ella en su blog, así que si queréis leerla solo clicad aquí. El argumento trata sobre Hana, una chica que en la universidad se enamora de uno de sus compañeros, y como él también se enamora de ella decide contarle su secreto: que es un hombre lobo. Ambos viven felices durante unos cuantos años y tienen dos hijos, Yuki y Ame, que adquieren el mismo poder que su padre, pero un día, cuando encuentran muerto al compañero de Hana, esta decide llevarse a sus hijos al campo para protegerles del miedo y del desconocimiento de la sociedad. Allí tendrá que criarlos sola y enseñarles a aceptarse tal cual son a pesar de que cuando crezcan tendrán que decidir si quieren vivir como humanos o como lobos. A mí me pareció una película preciosa, algo dura pero desde luego llena de emociones y sentimientos; muy recomendable sobre todo para la gente que disfruta con el cine de animación. Pero para los que no, siempre podéis darle una oportunidad.

Si habéis visto alguna o si os han entrado ganas de hacerlo, me encantará que me lo digáis para así compartir opiniones. ¡Hasta la semana que viene!

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